¿Pues que se
puede decir de la salida de hoy?. No se sabe por donde empezar a hablar. ¿Sobre el frío que ha hecho hoy, o de cuando nos compraremos una 29”, o acerca de que han debido de echar en el trazado de hoy para
que hayamos pinchado tres de nosotros sin quererlo ni beberlo? De todo un poco.
Es domingo, y
una vez hecha la convocatoria oficial, hay que nos vamos acercando poco a poco
todos al punto de reunión, la cafetería Jai-Alai. Kike, Raúl, Fer, Iñigo, Edu,
Bambino, Pote, Jon XL, Carlos (que estrenaba bici hecha a capricho) y Saúl. Más
tarde, por problemas mecánicos, se nos incorporará Eneko.
En un
principio pensábamos salir dirección al Vivero, pero por circunstancias
personales de algunos de nosotros finalmente nos hemos quedado cerca de casa,
pero vamos, la salida de hoy ha sido preciosa y muy exigente.
Tranquilamente para calentar, nos hemos dirigido desde el barrio hacia el parking del Pagasarri,
desde donde casi todos los del grupo han optado por seguir a los sherpas Kike y Raúl, los
cuales han dirigido sus monturas hacia el Arnotegi con el fin de descender por
una bajada exigente, a la vez que preciosa, que lleva a Uzkorta. Mientras, el
grupo de sabios, formado por Fer, Jon XL y Edu, que ya saben como se las gasta
esa bajada, deciden bajar por las piedras y ya ir directos a la barrera donde
da comienzo la subida de Uzkorta, para esperar la llegada de los exploradores y
de Eneko, hoy, alias “el Rojo”, ya que ha subido desde el barrio a lo que daban
sus piernas y nos ha aparecido congestionado, grande Eneko!.
Una vez el
grupo está completo, comenzamos a subir Uzkorta, donde un activo Fer se pone en
cabeza de grupo, y comienza a tirar, arrastrando tras el a una parte del
grupo, y otros deciden ir mas tranquilos con el fin de dosificar las fuerzas
para lo que quedaba de ruta.
Una vez pasado
Uzkorta, subimos Artabe, y de allí paramos en la campa de Txus, donde tras
comer algo comenzamos a bajar Bentako, pero nada más empezar el primer
pinchazo. Jon XL revienta la cámara de la rueda delantera y ahí que nos
quedamos los mas rezagados para echarle un capote en el cambio.
Bajamos
Bentako sin más novedad , donde allí espera el resto de grupo, para ya una vez
todos juntos, enfilar hacia la subida trasera del Pagasarri, la que está una
vez cruzada el río.
Al principio
vamos todos juntos, a un ritmo bueno, con alguna escapada de Bambino, pero más
o menos juntos, hasta que a un inspirado Jon XL, con ganas de picar al
personal, no se le ocurre otra cosa que decir lo siguiente: “parecemos los de
verano azul”. Y automáticamente se empiezan a oír bajadas de piñones, y se ve
en el velocímetro como la velocidad va aumentando, y con ello el ritmo de
respiración, y como el grupo se va estirando, todos callados, centrados en pedalear
y en no perder la rueda del compañero que está delante.
En esos
momentos ves la velocidad que cogen las 29” y como suben cuando las piernas de
quienes las empujan son buenas. Y vaya si lo son. Y por otro lado como algunos,
a pesar de tener 26” tiran con fuerza por seguir a la par de aquellos, y
empiezas a pensar de lo que serían capaces de hacer con una “ruedas grandes”. A
alguno seguramente no le veríamos el pelo. La subida ha sido muy intensa, pero
se ha pasado volando.
Coronamos la
subida, y allí que nos llega el segundo pinchazo. Bambino pincha de delante, y
entre cambio de cámara y rotura de válvula en el inflado pasa el tiempo, y se
nota como el frío va haciendo mella en nuestros cuerpos, y estamos ansiosos por
llegar a casa.
Una vez solucionado
el contratiempo, seguimos ruta para coronar nuestro querido Paga, y bajamos,
con cuidado, ya que está a tope de montañeros y familias con peques. A mitad de
cuesta nos despedimos de Saúl, el cual tira dirección Arraiz para ir a casa.
Y como no hay dos
sin tres, Edu también pincha la rueda delantera bajando “el Silencio”.
Afortunadamente gracias al líquido de la cámara, hinchar y listo.
Ruta preciosa
de 40 km, con una compañía perfecta, demostrando compañerismo, y pensando ya en
la siguiente salida.
La familia
Miribilla BTT va creciendo en poco tiempo, en este caso con Carlos y Saul. Ongi
etorri, bihotzez!. Y a toda aquella persona que este interesada en formar parte
de este Club que sepa que será bienvenida. Veniros un domingo y probad, no os
arrepentiréis. Eso si, traer las bicis limpias, que alguno de nosotros desde que está aquí no limpia la suya porque no le da tiempo entre salida y salida porque no se baja de ella, jajaja. Como muestra un botón:
Un saludo a
tod@s. Hurrengora arte.